CGT

Los movimientos que estamos observando en la empresa en los últimos tiempos nos hacen temer que la empresa esté preparándolo todo para acabar con el teletrabajo de forma progresiva e imparable. Primero se anunció la apertura del centro de Emilio Muñoz, donde ya hay gente trabajando y ahora toca al centro de San Romualdo, que se abrirá el 14 de diciembre.

En la comunicación que se nos ha remitido al Comité de Empresa dicen que la apertura del centro es para dar formación presencial, pero solo hay que leer el pantallazo de hangouts que ilustra esta página para tener claro que lo que pretenden es amedrentar y coaccionar a las personas que la empresa entiende que no cumplen con los requeridos de productividad, amenazándolos con tener que volver a trabajar a sus centros de trabajo.

La empresa se ha quitado ya la careta. Hace mucho tiempo que quedaron atrás aquellos videos donde salía hasta el Tato diciendo lo mucho y bien que la empresa había trabajado para implantar el teletrabajo de la noche a la mañana. Vamos que hicieron “chas” y el teletrabajo apareció a nuestro lado. Y ahora resulta que son incapaces de proporcionar una silla o un reposapiés a quien lo necesita ya que es un esfuerzo logístico descomunal. ¿A quién creen que engañan?

Lo único que hicieron fue intentar salvar sus beneficios, aunque para ello los medios los pusieran quienes trabajaban para la empresa. Nos mandaron a teletrabajar sabiendo que les saldría gratis y ahora que el Gobierno les obliga a pagar los gastos ya no les interesa, vamos, si te he visto no me acuerdo.

Desde CGT denunciamos ya hace tiempo los primeros traslados de personal en teletrabajo a trabajo presencial y la Inspección de Trabajo nos dio la razón: No se puede castigar a nadie a trabajar presencialmente por la productividad que se tenga. Hace ya unas semanas y ante los primero síntomas de lo que estaba ocurriendo desde CGT volvimos a presentar una nueva denuncia ante la Inspección de Trabajo por los correos, escritos y llamadas que desde algunas campañas se estaban haciendo, amenazando con quitar el teletrabajo si no se mejoraba la productividad, estamos esperando la resolución de nuestra denuncia para los próximos días.

No tenemos la menor duda de que la empresa acabará con el teletrabajo en el momento en que le cueste un euro, entonces se le olvidarán todas aquellas bobadas de los videos de que éramos héroes y que podíamos cambiar el mundo. Pero pueden estar seguros que desde CGT vamos a seguir denunciando cada vez que la empresa pretenda acabar con el teletrabajo, poniendo en riesgo la salud de los trabajadores y trabajadoras de Unísono para que alguien gane un puñado de euros más. Nosotros si nos creemos lo que decimos e intentamos cumplirlo.